8/7/14

Costa Rica fue un fracaso

Los Ticos dejaron el Mundial tras el empate contra Holanda y posterior eliminación por penales. No cumplieron con lo que se esperaba, hasta se fueron invictos. Además, el DT contó su secreto.
De pensar jugar sólo tres partidos a festejar el pasaje al quinto, otro fracaso que logró Costa Rica en Brasil.


Cada una de las 32 selecciones tiene un mismo objetivo, salir campeón. Lo que sucede es que tras el sorteo que se realizó en diciembre del año pasado, los países vieron que a algunos se les facilitaría pasar de fase y a otros se les complicaría. Está claro, nada es fácil pero uno sabe lo que tiene. En el caso de Costa Rica, en el Grupo D estuvo acompañado por Uruguay, Inglaterra e Italia, todos campeones del mundo.

Los jugadores Ticos, cuando se enteraron de su zona, sabían que la tenían complicada y que lo más seguro sería que no pasaran de fase. No es que no tenían facultades, sino que los rivales participaban en mejores ligas que ellos. Además, no pensaban en que se les complicaría ante Costa Rica sino cómo le iban a ganar.

Muchos jugadores de la liga local, mientras que se destacaban Keylor Navas, Bryan Ruiz y Joel Campbell. No había comparación con Muslera, Cavani y Suárez, Hart, Rooney y Sturridge o Buffon, Pirlo y Balotelli. Hasta la prensa imaginaba cuáles de los tres campeones del mundo se quedaría con dos de lugares para octavos.

En el caso de los hinchas, eufóricos por llegar al Mundial y por los rivales que tenían enfrente, pero nunca con la idea de pasar de fase. Costa Rica fue un fracaso, ya que no cumplió con las expectativas: jugó dos partidos más de lo pensado, y encima ganó dos encuentros. ¡Nunca perdieron!

Ya en el debut, el asombro dio la vuelta al mundo. Los Ticos vencieron 3-1 a Uruguay, quien subestimó al rival y terminó pagando. José Luis Pinto, el entrenador, propuso un juego desde atrás hacia adelante. El ataque surgió desde una buena defensa, y más sabiendo que siempre lo atacarían. Los Charrúas vieron como los centroamericanos se llevaban dos puntos más de lo pensado.

Luego llegó Italia, quien también había triunfado en el debut. El primero de los europeos, que no planteó el famoso catenaccio. La Azurra, a pesar de lo que hizo Costa Rica en el partido anterior, descuidó y no puso atención en las virtudes centroamericanas, tanto que terminó perdiendo por la mínima. Seis puntos, clasificación a octavos y esto ya era un metaobjetivo.

¿La tercera fue la vencida? No. Aunque fue al único que no le metió un gol. Costa Rica sí cumplió con el objetivo ante Inglaterra, cerrando el grupo con un cero a cero. Con esto, la estadía en Brasil era más de la pensada y hubo que cambiar los vuelo de regreso. Ahora, Grecia.

Primera vez en octavos en toda su historia, otro fracaso. Fracaso porque no era lo que se tenia en mente, aunque a medida que pasaban los partidos los jugadores cambiaron su objetivo. De sólo jugar tres partidos a pasar la mayor cantidad de tiempo en Brasil. Ya en la segunda fase, se enfrentaron a otro que nunca se pensó en octavos: los Helénicos.

Ante el tercer seleccionado europeo, lo que sucediera iba a estar bien. Se preparaban para felicitar a su selección por dar todo y estar muy cerca de cuartos, pero Costa Rica sufrió y siguió con rompiendo fronteras. Pasó por penales, tras ver como en el último minuto se lo empataban.

Llegaron los cuartos, dos fases más allá del objetivo y que no conocían. Muchos se preguntaban cómo se dio, y Pinto respondía que era por la preparación, el apoyo de la Federación, trabajos físicos, tácticos, análisis exhaustivos con un software que mostraba cómo jugaban sus rivales, alimentación justa y mucha confianza. Sabían de lo mejor de cada equipo, que las demás selecciones estaban futbolísticamente mejor que ellos, pero al fracasar tras pasar a octavos ya no serían el rival 'cuántos goles le meto' sino 'cómo hago para ganarle'.

Brasil, Holanda, Colombia, Francia, Argentina, Alemania, Bélgica y la ya no sorpresiva Costa Rica, todos en cuartos. A los Ticos le tocó otro elenco europeo, la Naranja Mecánica. Ya no era como contra Uruguay, Italia, Inglaterra o Grecia, ahora la mentalidad estaba en ganar. No quiere decir que nunca lo estuvo, pero el objetivo propuesto al principio ya no existía y si se estaba cerca de los cuatro mejores del Mundo había que llegar hasta allá.

Más de 120 minutos de sufrimiento, de ver cómo la pelota no entraba, o, en realidad, cómo Keylor Navas evitaba que pasase. 120 minutos en los que el último subcampeón no encontró forma de vencerlos, y Costa Rica pudo, cerca del final, haber sacado el segundo tomo de un libro que se llamase 'Hazaña Tica'. 120 minutos y penales, otra vez nervios.

Ni Robben, van Persie, Sneijder la pudieron meter, aunque ahora tenían la chance del mano a mano con Navas. Pero el que terminó con el nuevo objetivo de Costa Rica fue Louis van Gaal, DT de Holanda, que puso a Tim Krul en el arco a falta de un minuto para el final. El arquero atajapenales. La confianza no se perdió, porque si lo aguantaron 120 minutos y lograron el objetivo (no perder), podían vencer a los de Países Bajos.

El recuerdo del partido contra Grecia estaba presente, y soñaban con otra gran actuación de Navas en el arco. Nada de eso sucedió. Holanda metió cada uno de los cuatro remates que tuvo, Krul le atajó a Ruiz y Michael Umaña y Los Ticos sólo metieron tres goles. El fin de un sueño, aunque ese sueño se hizo realidad cuando terminó el partido ante los ingleses.

Cincos partidos, dos victorias y tres empates. Dos encuentros más de lo pensado y también mismas cantidad de triunfos por encima de las expectativas. Costa Rica fue un fracaso. Hizo más de lo que se pensaba, jugó mejor de lo que la prensa esperaba, destruyó a los sistemas que sus rivales y los dejó sin nada que hacer. Recibió sólo dos goles y encima tuvo una diferencia favorable (marcó cinco). Costa Rica fracasó, superó aquellos octavos de final de Italia 1990 y más allá que lo hecho en el 2002 y 2006.

El DT, quien fue tres veces campeón en Costa Rica y tuvo su primer paso por la selección entre 2004 y 2005, logró el pasaje a Brasil 2014 e igualó a las victorias en 1990, además tuvo más empates que ese solo conseguido ante China en 2002. Cabe recordar que en los primeros partidos de la clasificación, empató contra El Salvador y goleó a Guyana, pero estuvo cerca de quedar afuera. En el hexagonal, la siguiente fase, se le hizo más fácil y terminó detrás de los Estados Unidos.Los amistosos previos a la Copa no dieron un buen panorama, por lo que jugar los tres partidos era más que un hecho. Pero Costa Rica demostró que era más que sus rivales, que podía romper rachas. Es por eso que fracasó, porque si hubiera terminado última en su grupo habría cumplido con el objetivo. Con la ironía alcanzó para demostrar lo que hicieron Los Ticos, gracias por este fracaso.

Pinto, el DT, afirmó: "Hemos tenido un grupo que ha aprendido, hemos trabajado mucho y puedo decir que ha evolucionado en todos los aspectos. Costa Rica es un equipo estable emocionalmente, que tiene su personalidad futbolística y sabe comportarse ante las circunstancias, maneja los momentos futbolísticos, propone y es ordenado en todos los conceptos tácticos". Y contó su secreto: "Siempre me vestí igual: saco y pantalón gris, y una corbata roja. Eso me trae suerte".

0 comentarios:

Publicar un comentario

Dejen su opnion acerca del Tema. Pueden tambien dar una critica (constructiva). Gracias por Comentar!